Si bien el complejo escenario económico ha mantenido en una tensa calma a miles de chilenos que están intentando pagar sus deudas, es necesario tener en cuenta que los compromisos bancarios son prioritarios, cuando hay un contrato de compraventa y créditos a largo plazo como los hipotecarios.
Cristián Jarufe, broker inmobiliario de RE/MAX Urbano, experto en banca, explica cuáles son las consecuencias de postergar el pago de créditos hipotecarios.
Lo primero que señala es que el deudor se expone a asumir mayores costos, a una posible demanda judicial, donde se pone en riesgo la propiedad a que sea embargada, posteriormente rematada y, junto con ello, se pierda parte del patrimonio que se pudo haber generado con las amortizaciones de capital y plusvalías. Es recomendable intentar renegociar o gestionar su venta oportunamente.
“Las consecuencias legales que puede tener el dejar de pegar un crédito hipotecario es que las personas sean demandadas en un juicio de cobranza y el riesgo de perder la propiedad a través de un remate, la que incluso a veces no alcanza a extinguir la deuda, puede mantener la deuda vigente ingresando a Dicom”, explicó el especialista.
Lo primero que recomienda Cristián Jarufe es que es necesario exponer la situación a la institución que otorgó el financiamiento y buscar en conjunto una solución, según sea la dificultad, que va por un financiamiento complementario que permita ordenarse o una reestructuración de la deuda a mayor plazo, que permita quedar con un dividendo que se pueda pagar o bien, o gestionar una venta acordada. “De no alcanzar acuerdo, debe buscar refinanciar con otra institución en mejores condiciones y prepagar”, añadió.
El broker sugiere que no es conveniente dejar de pagar, ya que se aplican intereses a la tasa máxima convencional, gastos de cobranza e incluso, transcurrido 15 días u otro plazo que se señale, el acreedor tiene la facultad de aplicar la cláusula de aceleración del financiamiento y con ello considerar de plazo vencido toda la deuda, exigiendo su inmediato pago. Todo ello, perjudicando una solución más rápida, económica y sin perjudicar sus informes comerciales ni judiciales.